Quiero sentir tu escencia, tu perfume
El calor de tu presencia eterna
La fragancia que dejastes en el aire
Que me invade todo el cuerpo
Que me llena de energía y paz
Tu misterio es mi deseo
Y yo exploto de pasión
Y me lleno de lujuria
Al escuchar tu voz
Como un dulce cantar
Es un suave gemir
Tu piel toca la mía
Se conectan nuestras almas
Es perfección en el ritual
Siento euforia en todo mi ser
Que vuela de satisfacción y de placer
domingo, 23 de mayo de 2010
Corazones despistados
Vamos a sumergirnos en nuestros pensamientos
Ordenemos y encontremos los sentimientos
Que se nos han perdido, que los llevo el viento
Que se han caído profundos en un mar violento
¿Acaso es amor lo que nos sacó el aliento?
Alguna vez, alguna vez...
Lo hemos sentido alguna vez
Un día con todo al revés
Con la cabeza en los pies
Todo confuso ¿que es lo que se ve?
Estuvimos encadenados y atrapados
Ciegamente enamorados
Sin saber que es, pero enamorados
Con deseos alocados
Con corazones despistados
Ordenemos y encontremos los sentimientos
Que se nos han perdido, que los llevo el viento
Que se han caído profundos en un mar violento
¿Acaso es amor lo que nos sacó el aliento?
Alguna vez, alguna vez...
Lo hemos sentido alguna vez
Un día con todo al revés
Con la cabeza en los pies
Todo confuso ¿que es lo que se ve?
Estuvimos encadenados y atrapados
Ciegamente enamorados
Sin saber que es, pero enamorados
Con deseos alocados
Con corazones despistados
Su hijo
Ese niño que en las aguas cayó
Fue un niño que allí murió
Sin ningún respiro el adios marcó
Día y noche, sin parar se lo buscó
Gran desilusión él no apareció
Hasta días después que se lo encontró
Un mirada perdida en el dolor que lo hiere
Una vida que se desvanece
Un corazón vacio que sangra
Hundido en una culpa que no es verdadera
Se miente y vive una tortura que no le pertenece
Su arrepentimiento y frustración crecen
La conciencia está ciega
La sociedad le condena
En el olvido guarda sus penas
Su hijo se ha ido y no hay más que hacer
Solo mira al cielo, una estrella sin igual podrás ver
Fue un niño que allí murió
Sin ningún respiro el adios marcó
Día y noche, sin parar se lo buscó
Gran desilusión él no apareció
Hasta días después que se lo encontró
Un mirada perdida en el dolor que lo hiere
Una vida que se desvanece
Un corazón vacio que sangra
Hundido en una culpa que no es verdadera
Se miente y vive una tortura que no le pertenece
Su arrepentimiento y frustración crecen
La conciencia está ciega
La sociedad le condena
En el olvido guarda sus penas
Su hijo se ha ido y no hay más que hacer
Solo mira al cielo, una estrella sin igual podrás ver
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